Dos semanas de mucha tensión vivió el personal en la Oficina Regional del CIMMYT en Katmandú, Nepal, en el sur de Asia. Durante las diarias y prolongadas manifestaciones, la gente a menudo se topaba con las fuerzas de seguridad, ya que el gobierno decretó toques de queda diurnos. Esta disposición dificultó las operaciones en la oficina de Nepal. “Aquí en la oficina del CIMMYT hemos trabajado siempre que el toque de queda nos lo ha permitido”, comenta Memo Ortiz Ferrara, Coordinador en la región. “Si comienza por la tarde, vamos a la oficina y hacemos el trabajo más urgente. Si la orden es que haya toque de queda todo el día, obviamente, nos quedamos en casa”.
Ante el empeoramiento de la crisis, a fines de la semana pasada algunos organismos internacionales y embajadas estaban preparándose para evacuar a su personal extranjero. Sin embargo, este lunes, cuando el rey Gyanendra de Nepal accedió a varias peticiones de los manifestantes, la situación se estabilizó de inmediato; se suspendieron las manifestaciones y se levantaron los toques de queda durante el día. Todos los empleados del CIMMYT en Nepal están bien y reanudaron sus labores normales. Memo Ortiz Ferrara agradece al Director General y a los miembros del Comité de la Administración el apoyo moral que les brindaron durante estos momentos difíciles.