RUTKOSKI SE DEDICA A ESTUDIAR LA PATOLOGÍA DE LAS ROYAS DEL TALLO Y LA HOJA
En la preparatoria, Jessica Rutkoski, igual que cualquier chica, pensaba que las matemáticas eran algo tedioso y complejo, y, simplemente, evadía la materia.
Sin embargo, en la universidad se animó a probar suerte y se inscribió en un curso de cálculo. Para su sorpresa, empezó a sacar muy buenas calificaciones.
“Me dí cuenta de que no era mala en matemáticas, sino que, más bien, tenía temor, tenía poca confianza o quizá solo era mi predisposición”, dice riendo Rutkoski, cuya pasión ha sido siempre la ciencia.
“No hay que dar por hecho que uno es bueno o malo en algo, porque al llegar a la universidad puede que descubras que eres mejor de lo que creías.”
Las excelentes calificaciones que Rutkoski obtuvo en la universidad la ayudaron a convertirse en una destacada estudiante de ciencias —más de lo que ya era en la prepa.
Su interés en la genética la llevó a colaborar en un programa de mejoramiento de maíz dulce, cuando todavía era estudiante en la Universidad de Wisconsin. Posteriormente decidió estudiar un doctorado y le pareció interesante el proyecto Resistencia durable del trigo a la roya de la Universidad de Cornell, en Nueva York. En Cornell, pasó largas horas en el invernadero y en el campo aprendiendo sobre enfermedades y resistencia del trigo a éstas, sobre todo de las royas del tallo y de la hoja. Aprendió también cómo programar y analizar datos utilizando herramientas estadísticas y de genética cualitativa.
Un año después de que terminó su doctorado se dedicó a mejorar todas las características del trigo –está ampliando su campo de acción e incluyó el aumento de los rendimientos entre sus proyectos.
“En algún momento quiero hacer uso de la tecnología existente para predecir todos los caracteres”, anuncia. “Los datos nos permiten crear modelos de predicción basados en la huella genética en lugar de usar genes —no necesariamente tenemos que saber todo sobre los genes o los mecanismos intrínsecos de los caracteres”.
Actualmente, Rutkoski es profesora auxiliar en Cornell. Pasa unos tres meses impartiendo un curso denominado “Teoría y métodos de selección”, en el cual sus estudiantes aprenden a maximizar las ganancias derivadas de la selección en los programas fitotécnicos. El resto del año trabaja en el CIMMYT.
“Hay mujeres que están haciendo este tipo de trabajo, pero en realidad yo no me he inspirado en ninguna de ellas”, dice. “Mi inspiración para seguir estudiando fueron colegas que se sentían frustrados porque tenían empleos mal pagados o sin ninguna proyección”.
Algunas mujeres tomaron caminos diferentes; unas prefirieron casarse y tener una familia”, señala Rutkoski, y añade: “Si de veras te apasiona algo, entonces no te preocupes, porque ya vendrán otras cosas”. Si hay algo que de veras te apasiona, entonces déjate llevar y todo lo demás llegará a su tiempo”.
Las opiniones expresadas en este artículo son las de los autores y no necesariamente representan las del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo.
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