“Robustecimiento de la capacidad biotecnológica y su aplicación sustentable en los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura en Kazajistán”, es el nombre de una iniciativa que en 2010 lanzaron el Centro Nacional de Biotecnología de la República de Kazajistán, JSC “KazAgroInnovation”, la FAO y el CIMMYT. La iniciativa cobra ahora un nuevo impulso al realizar el seminario denominado “Recursos fitogenéticos modernos: conservación, caracterización y aplicación de métodos”, organizado por el CIMMYT y celebrado del 24 al 28 de octubre en Almaty.
Muratbek Karabayev, de la oficina del CIMMYT en aquel país, en su discurso de bienvenida hizo énfasis en la movilización de los recursos fitogenéticos y en el papel de la biotecnología y la fitotecnia para la preservación y manejo de los recursos genéticos, la agricultura y la producción de alimentos. Destacó también que los objetivos solo pueden alcanzarse si hay cooperación entre fitomejoradores y biotecnólogos y si ésta aporta beneficios a ambos grupos; si las alianzas tienen un propósito en común; y si existe confianza entre los colaboradores, además de recursos económicos para que la investigación se realice dentro de los más altos estándares internacionales.
Olga Mitrofanova, jefa del Departamento de Recursos Genéticos de Trigo del Instituto N.I. Vavilov de la Industria de las Plantas (VIR), dio una conferencia en torno a la función de los recursos fitogenéticos en el mejoramiento de plantas y la contribución del VIR a esta ciencia; como ejemplo citó la clasificación agroecológica de los cereales por subregiones, según sus condiciones climáticas y las variedades que se siembran. Esto es de particular importancia en países tan grandes como Kazajistán, ya que deben tenerse en cuenta los factores de cada región al elaborar y poner en marcha estrategias relacionadas con el uso de biotecnología, recursos fitogenéticos y mejoramiento.
Otros ponentes fueron Sergej Martynov, investigador de VIR, y Elena Salina, del Instituto de Citología y Genética, quienes en sus conferencias abordaron los temas de la diversidad genética y la evolución de las especies de trigo domesticadas y silvestres, así como los diferentes métodos para el análisis de recursos fitogenéticos.
La concurrencia estuvo de acuerdo en que la aplicación de biotecnología en la producción de cultivos deberá evaluarse con base en la eficiencia del mejoramiento de nuevas variedades. En las actividades a nivel nacional, deberá contarse con la participación de colaboradores de distintos sectores, a fin de planificar la preservación y utilización eficaz de los recursos fitogenéticos en el futuro. Sus mayores prioridades son preservar semilla libre de enfermedades in situ y ex situ, guardar duplicados en otros bancos y regenerar y reponer semilla de las colecciones, y que personal bien calificado caracterice y documente apropiadamente las colecciones. Establecer contacto con depositarios de otras colecciones es también vital para identificar y obtener nuevas fuentes de semilla y para la posterior distribución y utilización de germoplasma.
Como se reportó en Informa 1767, muchos científicos kazajos también creen que es necesario que exista un banco nacional de recursos genéticos en su país y que se formule una estrategia nacional para la conservación y uso de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura.