De gorras y sombreros se pobló el auditorio en El Batán, el viernes 9 de octubre, con motivo de la visita de un grupo de 32 agricultores hidalguenses y mexiquenses que habían solicitado a integrantes del equipo de agricultura de conservación (AC) una plática sobre esta tecnología, con especial énfasis en el manejo de plagas de maíz.
Los agricultores, muy atentos, escucharon las presentaciones de Andrea Chocobar y Ricardo Romero, del Programa de Agricultura de Conservación, y de Leocadio Martínez, del Programa Global de Maíz. Andrea Chocobar habló de las actividades del CIMMYT; Ricardo Romero del sistema de la AC; y Leocadio Martínez de las plagas que afectan al maíz y cómo diagnosticarlas y controlarlas en el campo.
El grupo estaba formado principalmente por productores de maíz de autoconsumo, con problemas diversos en cada una de sus localidades. Algunos de ellos ya cuentan con módulos de AC, como parte del hub de AC en los sistemas de producción de maíz en los valles altos de México. En esta iniciativa colaboran entidades privadas, talleres de maquinaria, comercializadoras de semilla como Asgrow, Dekalb, y entidades públicas como la SAGARPA, el INIFAP y el CIMMYT. En promedio, los agricultores del grupo visitante han practicado la AC de uno a dos años y, dados los cambios positivos que han observado tanto en sus terrenos como en su nivel de vida, les interesa profundizar en el uso de esta tecnología.
El Ing. Juan Antonio Sánchez Zamora comentó que “En Ixmiquilpan [Hidalgo], la agricultura de conservación puede ayudar a los agricultores, porque al incorporar materia orgánica [retención de residuos], los suelos se suavizan y mejora su textura; además, es un buen regulador del pH. Esta es mi tercera visita al CIMMYT pero hoy, por ejemplo, aprendí algo nuevo sobre maquinaria.” 
Originario de Soyaniquilpan, Estado de México, Jacobo Montiel Villalbán, quien siembra, además de maíz, cebada y alfalfa, visitaba por segunda vez el CIMMYT; la primera vez viajó a la estación experimental en Toluca. “Ahora vengo con un grupo diferente, pero todos estamos de acuerdo en que lo que hace el CIMMYT nos ofrece una opción para seguir subsistiendo en el campo, porque de otro modo, no se puede…”, comentó Montiel.
Agricultores de esta zona habían solicitado a su técnico de Dekalb- Asgrow, que forma parte del hub de AC, más información sobre plagas, ya que el follaje del maíz se había cubierto de manchas. El técnico, que fue adiestrado por expertos en AC del CIMMYT, solicitó el apoyo de éstos y, con su ayuda, organizó la visita de los agricultores. Además de la descripción de plagas y de cómo diagnosticarlas en el campo, por parte de Leocadio Martínez, se obsequió a los agricultores un manual de plagas para que ellos mismos puedan detectarlas a tiempo.
Distintos fueron los problemas que los agricultores mencionaron –suelos salinos, plagas, suelos compactos, pérdidas de rendimientos– pero, al final de la visita, después de recorrer las parcelas de larga duración que sirven como plataforma de capacitación, de escuchar las explicaciones del Ing. Francisco Magallanes, superintendente de El Batán, respecto a los métodos de siembra y la maquinaria que emplean, y de constatar los resultados de aplicar la AC, nuestros visitantes coincidieron en que la solución es el cambio, como lo expresó el señor Jacobo Montiel: “El campo cambia, nunca es igual año con año. La solución es innovar, es decir, que si el campo cambia, nosotros los agricultores también tenemos que cambiar.”