Los agricultores de todo el mundo están en la primera línea del cambio climático. Se ven directamente afectados por sequías más frecuentes y severas, aumentos de temperatura, precipitaciones variables, plagas emergentes y enfermedades de los cultivos. En los países de bajos y medianos ingresos, donde la agricultura es la principal fuente de ingresos para algunas de las personas más pobres y vulnerables, la agricultura debe adaptarse de manera urgente a nuevas presiones inducidas por el clima.
Con la agricultura en la agenda de las pláticas de esta semana sobre el clima de la ONU en Katowice, Polonia, destacamos algunas innovaciones alentadoras para mejorar la resistencia y la productividad de la agricultura bajo el cambio climático. La historia fotográfica del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) muestra las ventajas de la acción conjunta de agricultores, investigadores, gobiernos, organizaciones sin fines de lucro y empresas.