La agricultura climáticamente inteligente puede ser “un instrumento útil para hacer frente a los problemas derivados del cambio climático y la variabilidad del clima”, opina el Dr. Kai Sonder, Jefe de la Unidad de Sistemas de Información Geográfica del CIMMYT, quien fue uno de los 754 investigadores procedentes de 75 países, incluidos 39 del CIMMYT, que asistieron a la tercera Conferencia Científica Internacional sobre Agricultura Climáticamente Inteligente; el evento se llevó a cabo en Montpellier, Francia, del 16 al 18 de marzo.
“Si bien los problemas son diferentes para los países en desarrollo y los países desarrollados, el cambio climático nos afecta a todos”, señala Sonder. Millones de agricultores de bajos recursos en los países en desarrollo poseen menos de una hectárea de tierra, ganan menos de un dólar al día y son vulnerables a los eventos climáticos extremos. Muchos de los agricultores en los países industrializados batallan para ganarse la vida, dependen de subsidios y seguros, y son vulnerables a los eventos climáticos extremos.
La agricultura moderna, la producción y distribución de alimentos, que son grandes emisores de gases de invernadero, generan cerca del 25% de las emisiones globales. La agricultura climáticamente inteligente busca soluciones a los problemas interrelacionados de seguridad alimentaria, aumentando la productividad del campo, fortaleciendo los sistemas de producción de alimentos y reduciendo la emisión de gases en la agricultura.
Durante la conferencia se discutieron los problemas e identificaron las áreas que la agricultura climáticamente inteligente tendrá que atender. “California no ha practicado la ACI en 50 años y ahora tiene que lidiar con el problema del manejo del agua subterránea”, enfatiza Sonder. “Asimismo, Ciudad Obregón y Sinaloa en México son zonas de riego semidesérticas donde tienen que aplicarse a gran escala basándose en las actividades del CIMMYT con sus colaboradores locales.”
En la conferencia también hubo una exhibición de los proyectos de las organizaciones participantes. “Esto está volviéndose una parte integral de las actividades del CIMMYT, ya que las condiciones climáticas alteran con mayor frecuencia los ciclos de cultivo”, dice Sonder. “MasAgro hace investigación para lograr un uso más eficiente del agua y los nutrientes en México, y el CIMMYT está generando variedades de maíz y trigo tolerantes a factores adversos como el calor y la sequía, y sus combinaciones.” En coordinación con el Programa Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS), ha realizado proyectos piloto en 27 aldeas climáticamente inteligentes en Haryana, India, mediante los cuales se diseminarán importantes tecnologías climáticamente inteligentes.
La conferencia ofreció la oportunidad a los participantes de identificar áreas de cooperación a futuro. Sonder menciona su encuentro con Jacob van Etten, científico sénior de Bioversity International, que atiende asuntos relacionados con el cambio climático en Costa Rica y usa sensores iButton para medir datos climáticos en el campo. “Chips como éstos y otros dispositivos apropiados nos ayudarían a llegar a más lugares, y me gustaría utilizarlos para monitorear las condiciones de almacenaje y humedad de los silos del proyecto Almacenamiento Eficaz de Grano en África Oriental y África Austral y en las actividades poscosecha de MasAgro en México”, concluye Sonder.