Sam Storr
Representantes de los sistemas nacionales de investigación agrícola de Bolivia y Ecuador visitaron el CIMMYT, del 7 al 9 de abril, con objeto de sentar las bases de colaboración a futuro para aumentar su producción de maíz. La reunión de las partes interesadas fue precedida por una visita de funcionarios colombianos y, a finales de abril, representantes de instituciones peruanas visitarán El Batán, para concluir las primeras pláticas entre representantes del CIMMYT y de los cuatro países sudamericanos.
“Estamos evaluando de qué manera el CIMMYT puede trabajar de manera más rápida y concreta y, junto con estos países”, ayudar a producir alimentos para sus habitantes. Bolivia es autosuficiente en maíz, pero podría llegar a ser exportador”, según Luis Narro, fitomejorador del CIMMYT-Colombia. “Ecuador está importando más pero su gobierno se ha propuesto lograr la autosuficiencia en dos años. Por esta razón, quieren saber de qué manera el CIMMYT puede tener una mayor participación para solucionar los problemas de producción que tienen esos países, y también ayudar a mejorar las condiciones de vida de los productores.”
El grupo de visitantes estaba formado por Nemesia Achacollo, ministra de tierra y desarrollo rural de Bolivia; Gabriel Hoyos, director general del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF, Bolivia); y José Luis Zambrano, director de investigación del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIAP, Ecuador). Se hicieron presentaciones para los visitantes sobre la investigación avanzada de maíz en el CIMMYT, que incluyeron una introducción al trabajo de intensificación sustentable que está haciendo MasAgro. Después de ver que el CIMMYT realiza un sinnúmero de actividades, Achacollo dijo estar impresionada por los desafíos que tiene Bolivia para establecer su propio centro internacional de quinua.
Fueron también a la estación experimental de Agua Fría, en Puebla, donde Achacollo anunció que el gobierno de Bolivia formulará políticas que permitan a sus jóvenes científicos recibir capacitación en instalaciones similares. “Debemos invertir en las futuras generaciones para que sean ellos quienes funden las bases del conocimiento sobre agricultura”, expresó. “No podemos quedarnos atrás.”