5 de mayo de 2015.
Estamos a una semana de concluir con Chiapas No Quema, iniciativa mediante la cual hemos promovido las ventajas de dejar el rastrojo en la parcela y dado a conocer los efectos negativos que la quema acarrea tanto para la producción agrícola como para el medio ambiente. Una parte importante de este quehacer ha sido escuchar de voz de los productores las razones por las cuáles prefieren aprovechar el residuo de cosecha en sus predios, en vez de quemarlo.
A continuación les compartimos algunos testimonios de productores de Chiapas sobre sus resultados en campo:
“Yo no quemo mi parcela porque el rastrojo le da vida al suelo, he notado que le aporta materia orgánica y el terreno se erosiona menos.”
Enrique Abadía Pimentel, ejido Espinal de Morelos, Ocozocoautla de Espinoza
“Si ya no quemamos, dejamos de contaminar nuestro ambiente y le regresamos la fertilidad al suelo.”
Noel Alvarado Maldonado, ejido de San Caralampio, frontera Comalapa
“Con el rastrojo en la parcela cosecho abono, ya que su descomposición incrementa la presencia de materia orgánica.”
Abelardo López Gómez, Benito Juárez Boluwa, Ocosingo
“Después de cuatro años de no quemar el rastrojo, he notado que el frijol se da mejor, por eso ahora pienso sembrar jitomate rojo para combinarlo con el maíz; quiero incrementar la productividad de mis tierras.”
Abelardo Jiménez Guzmán, Amatitlán II, Ocosingo
“Yo no quemo el rastrojo porque veo que año con año mi suelo se va abonando y la milpa no se afecta por la sequía, así que levanto mejor cosecha.”
Pedro López Barrios, rancho Buenos Aires, Villa Corzo
“Siembro en ladera y al dejar el rastrojo tuve menos problemas de pérdida de suelo por escurrimiento.”
Felipe Sánchez Vázquez, San Miguel El Grande, Ocosingo
“Ya no quemo el rastrojo porque la tierra de mi parcela es más porosa y se dan bien los cultivos.”
Pedro Jirón Meza, ranchería Bethel, Ocosingo
¡Gracias por compartirnos sus valiosas experiencias y fomentar que Chiapas No Quema! Esperemos que estos resultados motiven a más productores para emplear prácticas sustentables en sus parcelas y en sus métodos de producción.