“Anteriormente a los 40 días ya tenía afectaciones por gusano cogollero y tenía que hacer aplicaciones (de plaguicidas), a diferencia de este año que el cultivo se fue más limpio hasta la cosecha. Se fue muy sano, no hubo ningún problema”, comenta Abelino, productor del Valle del Évora, en Sinaloa, México.
“Siembro maíz amarillo para un proyecto de Kellogg con acompañamiento técnico del CIMMYT. Este año utilicé feromonas. Esta tecnología me ayudó y, con respecto a la anterior forma de trabajar, bajé el costo en cuestión de agroquímicos. Fue más barato porque no hice aplicaciones. Fue el primer año que usé las feromonas y el cultivo fue un cultivo muy sano”.
Apoyo al Abastecimiento Responsable en México es un proyecto de la compañía Kellogg y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), cuyo objetivo principal es producir cereales de manera sustentable, por ello promueve sistemas como la agricultura de conservación y prácticas como el manejo agroecológico de plagas, enfoque que incluye el uso de feromonas de confusión sexual para controlar las poblaciones de gusano cogollero.
“Tenía miedo de usar esta nueva tecnología porque era algo que yo no conocía. Decidí usarla porque me apoyan los técnicos del proyecto, por eso me animé. Como ya estamos acostumbrados a utilizar agroquímicos, dije «no pasa nada si me cae el gusano, lo único que tendría que hacer sería el mismo sistema de antes»”, comenta Abelino.
A diferencia de los agroquímicos que eliminan tanto a insectos plaga como a insectos benéficos —muchos de ellos polinizadores, como las abejas—, las feromonas de confusión sexual solo actúan sobre la plaga específica (el gusano cogollero en este caso), inhibiendo su reproducción y, por tanto, disminuyendo significativamente el número de su población.
“Ahora que aquí en el predio veo cómo funciona la tecnología, la pienso adoptar como productor porque nos está bajando los costos, que es lo que uno anda buscando. Ya con la experiencia que viví este año voy a compartir con otros productores que sí funciona. Yo ya lo comprobé”.
Para el proyecto, el acompañamiento técnico es fundamental para que los productores adopten las prácticas sustentables que se les recomiendan: “Con el acompañamiento que tuve durante este ciclo me encantaría seguir siendo productor de este proyecto, en primer lugar porque el maíz amarillo sí ha sido rentable y, en segundo lugar, porque estoy satisfecho con la atención que me brindan, en facilitarme el conocimiento y aparte la comercialización que está garantizada y que es lo más importante”, finaliza el productor.