“Nos interesa que los socios conozcan el funcionamiento correcto del equipo de fumigación para que lo cuidemos y nos dure mucho tiempo, pero principalmente que los insumos sean aplicados correctamente, trabajen y su efecto sea exitoso para no gastar de más y que las plagas o malezas sean controladas eficientemente”, comenta José Luis González, productor de cebada de la comunidad de San Francisco de la Soledad, en Cuerámaro, municipio del estado mexicano de Guanajuato.
José Luis, sus hermanos y otros integrantes de su familia forman una sociedad agrícola en la que comparten tractor y otros implementos. Recientemente adquirieron una aspersora y, aunque han hecho fumigaciones con buenos resultados, “creemos que mejorando esta actividad podemos aumentar el rendimiento de la cebada”, señala José Luis quien participa en Cultivando un México Mejor, iniciativa de HEINEKEN México con el soporte científico del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
Cultivando un México Mejor apuesta por el desarrollo de capacidades entre los productores para promover y consolidar una agricultura sustentable para el cultivo de cebada. El objetivo es optimizar el consumo de agua en este cultivo, pero también cuidar el suelo y su biodiversidad, generar un menor impacto ambiental en general, y propiciar mejores condiciones para los productores.
Cuando los productores implementan prácticas sustentables para manejar plagas y malezas no solo reducen el uso de productos potencialmente nocivos para el medioambiente y la salud humana, sino que pueden disminuir sus costos de producción, ayudar a las plantas a aprovechar mejor el fertilizante e incluso a mejorar la calidad del grano cosechado. Por esta razón el proyecto pone énfasis en capacitar a los productores en estos y otros temas.
“Después de participar en una capacitación sobre el manejo integrado de plagas han tomado interés en capacitarse en el tema de calibración de equipo de fumigación porque, como sociedad, consideran que todos los socios deben estar capacitados”, menciona el equipo del proyecto que brinda acompañamiento técnico a José Luis y a otros productores participantes.
Usar semillas certificadas libres de semillas de malezas, realizar un buen diagnóstico para identificar las malezas presentes y los productos más adecuados para su manejo, así como utilizar densidades de población adecuadas, coberturas vegetales, hacer rotación de cultivos y revisar y calibrar los equipos de aplicación son algunas de las prácticas con las que se puede hacer un manejo integral de malezas, señala el equipo técnico del proyecto.
“Sabemos que producir para la cervecería HEINEKEN es producir con altos estándares de calidad, y eso implica usar insumos permitidos por esta empresa, productos que son de bajo impacto ambiental, por eso debemos hacer aplicaciones adecuadas en el cultivo, para lograr una producción responsable con el medioambiente y la sociedad”, concluye José Luis, mientras que, con la asesoría de especialistas del CIMMYT, calibra la aspersora con la que él y los otros miembros de su organización seguirán implementando prácticas agrícolas sustentables.