Productores de la comunidad tsotsil de Chenalhó, Chiapas, participaron en el ‘Taller de fertilidad y uso de mejoradores de suelo para complementar la fertilización’, impartido por especialistas de MasAgro.
Por: Dorian Aguilar Sánchez, formador MasAgro.
3 de julio de 2019.
Chenalhó, Chis.- Enclavada en lo alto de la Sierra Madre de Chiapas, la superficie del municipio de Chenalhó está constituida en 90% por terrenos accidentados con pendientes pronunciadas. Además, llueve abundantemente todo el año. Este característico paisaje montañoso favorece la erosión de los suelos destinados a la actividad agrícola y, consecuentemente, la pérdida de su fertilidad (debido al flujo del agua, que arrastra los mejores suelos de las parcelas).
Para devolverle a la tierra su fertilidad, productores de la comunidad tsotsil de Chenalhó decidieron innovar su sistema de producción: la milpa. Así, con la asesoría de especialistas de MasAgro —programa impulsado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— realizaron una práctica para utilizar mejoradores de suelo, es decir, compuestos que reducen la compactación, permitiendo airear el suelo para que el agua y los nutrientes lleguen más fácilmente a las raíces de las plantas.
La práctica que realizaron los productores fue parte del ‘Taller de fertilidad y uso de mejoradores de suelo para complementar la fertilización’. Además de lo relacionado con los mejoradores, se trataron temas como los macro y microelementos (nutrientes minerales necesarios para el crecimiento) que requiere el cultivo de maíz, como el nitrógeno. Respecto a este, se habló de la importancia de la introducción de leguminosas como el frijol y la canavalia —cuyas raíces profundas ayudan a roturar el suelo y mejorar la infiltración de agua y la oxigenación— para su fijación en el suelo.
El taller, que también forma parte de la vinculación entre MasAgro y Yaxalum Chiapas A.C., proporcionó además información concreta y práctica para que los productores mejoren su sistema de producción de forma sustentable —aprovechando los recursos y evitando la erosión de los suelos— con acciones como sembrar en sentido perpendicular a la pendiente, aplicar fertilización foliar, evitar las quemas agrícolas y dejar la mayor cantidad de rastrojo distribuida sobre la superficie.
Los productores de Chenalhó están conscientes de que recuperar la fertilidad de sus suelos no será algo inmediato, pero con los resultados positivos que han notado en sus parcelas saben que van en la dirección correcta. Con el conocimiento adquirido y las innovaciones adoptadas, estos productores esperan revitalizar el sistema milpa en su región, ya que paulatinamente se ha abandonado, y —a través de esta recuperación de la fertilidad de los suelos— fortalecer también el tejido social de su comunidad.