Pénjamo, Gto.- “Hoy en día el principal reto que vamos a tener como productores va a ser el cuidado de los recursos naturales, principalmente el agua, así que tenemos que aprender a adaptar nuevas tecnologías para su cuidado, llámese riego por goteo, sistemas de riego más eficientes, aspersiones, pero cuidar siempre el agua porque sí está bajando mucho el nivel”, comenta José Aranda Pérez, productor de Pénjamo que participa en el Plan Maíz, un proyecto impulsado por Nestlé con el soporte científico del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
José es un productor joven, se dedica al campo desde hace cinco años, terminó su carrera de ingeniero agrónomo hace tres y desde entonces se dedicó por completo a la agricultura: “yo entré a la guerra sin saber nada de agricultura y hasta la fecha sigo aprendiendo, he logrado avanzar aceptando consejos, preguntando y no quedándome con la duda. Por eso es muy bueno tener acompañamiento técnico de este proyecto porque no por el hecho de que uno sea profesionista quiere decir que sabe todo. Los técnicos traen ideas nuevas, lo acompañan a uno, lo aconsejan, y eso sirve para tomar buenas decisiones y corregir lo que uno está haciendo mal”, comenta.
El proyecto Plan Maíz le da valor a la producción sustentable y por eso promueve una amplia gama de prácticas que le permiten a los agricultores participantes cuidar los recursos naturales y obtener mejores niveles de rentabilidad: “tenemos varias parcelas demostrativas e invitamos a los agricultores a días de campo, vamos y les mostramos lo que estamos haciendo para que ellos por su propia cuenta vean si funciona o no y le den el visto bueno”, comenta Andrés Germán Loza Medina, de la Financiera Sakxim, la cual está sumando esfuerzos con Nestlé y el CIMMYT para elevar la cantidad y la calidad del grano que se cultiva en México a través de prácticas respetuosas con el medioambiente.
“Otro gran reto es que la gente entienda que la tecnología va a ir cambiando y uno tiene que ir adaptándose a ello. Por eso es importante informar a los jóvenes, acercarlos al campo, que vean cuáles son los procesos, que entiendan que del campo es la comida. Por ejemplo, Pénjamo vive del campo, sin el campo aquí en Pénjamo no hay movimiento, no hay dinero, no hay nada. A los jóvenes que trabajan conmigo yo los oriento a que sigan estudiando y a todos mis sobrinos me los llevo a trabajar a que conozcan el campo”, dice José, quien ve en proyectos como Plan Maíz una oportunidad para que los jóvenes consideren una vocación en el campo y sean innovadores.
“Ahorita es muy buen tiempo para invitar a los jóvenes. Nosotros como técnicos —lo acompaña el ingeniero Manuel Tafoya—compartimos con los jóvenes para invitarlos a que formen parte de este ramo y que vean que es un negocio redituable. Periódicamente hacemos exposiciones en nuestras sucursales, invitamos a productores y a sus hijos para que vean nuestra forma de trabajar y se les comparte el mensaje de la Agricultura Sustentable”, finaliza el ingeniero de la Financiera Sakxim.