León, Gto.- La plataforma de investigación de León es un espacio donde actualmente se están evaluando nuevas variedades de maíz con la finalidad de mejorar el panorama agropecuario de Guanajuato. En la plataforma ya se ha logrado incrementar alrededor de 45% la producción de maíz forrajero con respecto al rendimiento promedio en la región, pero los nuevos estudios buscan además identificar aquellas variedades de maíz que después de su cosecha y su proceso de ensilaje den forrajes de mayor calidad a fin de favorecer la producción de leche y carne.
La plataforma de investigación de León forma parte de la red de plataformas de MasAgro Guanajuato —programa de la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAyR) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— y en ella colaboran investigadores de la Universidad De La Salle Bajío y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT). La plataforma incluye un área de validación o vitrina de maíces en la que se están evaluando 16 variedades de maíz, aproximadamente. De estas se están recolectando datos como el rendimiento final en forraje verde, materia seca, el rendimiento en grano, así como parámetros importantes de calidad como los relacionados con los almidones, las fibras y la digestibilidad del ensilaje.
La alianza estratégica del centro de investigación científica internacional y la institución de educación superior, mediante MasAgro Guanajuato, tiene el objetivo de facilitar la difusión del conocimiento científico entre los productores. En este sentido, recientemente se realizó un recorrido de campo donde se mostraron los resultados preliminares de las nuevas variedades comerciales de maíz sembradas con prácticas de Agricultura de Conservación —en el cual también estuvieron presentes representantes de diversas casas comerciales de semillas—.
En la plataforma, los estudiantes de la Escuela de Agronomía realizan, entre otras, prácticas enfocadas al muestreo de diversos componentes, parámetros o características como la densidad de población, altura de planta, altura de mazorca, peso de mazorca, ancho de las hojas, entre otras; así se colectan diversas muestras que se ensilan en micro silos que tiene la universidad para su fermentación; después se vuelven a tomar muestras y estas se llevan al laboratorio para realizar análisis bromatológicos —evaluación de las propiedades químicas y calidad de los nutrientes— con los cuales se pueden obtener datos sobre rendimiento y calidad final del grano y del forraje.
Otro de los objetivos fundamentales de la plataforma es la generación de datos e información para apoyar a los agricultores locales en temas como el manejo agronómico de sus cultivos, los diversos tipos de labranza y la calidad de ensilaje. Atendiendo estos aspectos, la Agricultura de Conservación ha demostrado ser un sistema relevante para aumentar el potencial productivo de forraje en la zona, permitiendo pasar de 64 toneladas por hectárea (t/ha), que es el rendimiento promedio de maíz forrajero en León, hasta datos promedio de 108 t/ha de forraje verde que se han obtenido en la plataforma.
A través de la evaluación de las nuevas variedades es posiblemente identificar aquellas que después de su cosecha y su proceso de ensilaje den un forraje de alta calidad. Este es un punto clave para los productores —tanto pequeños o medianos productores que producen solo maíz para silo, o medianos o grandes productores y ganaderos que se enfocan a la producción de leche o carne—, ya que la calidad de un buen ensilaje se traduce en una mayor cantidad de kilogramos de peso en ganado para producción de carne o en más litros de leche en ganado lechero.
Con este tipo de estudios, MasAgro Guanajuato busca que el sistema de los productores locales ya no se enfoque exclusivamente en el rendimiento en toneladas, sino también en una mayor calidad en su ensilaje a partir de la elección de variedades más adecuadas y de prácticas más sostenibles. En este sentido, es importante destacar que durante el recorrido de campo se habló del uso de drones para fumigar o fertilizar grandes extensiones de cultivo, así como del uso de feromonas de confusión sexual como una alternativa real para contrarrestar el uso de sustancias químicas para combatir al gusano cogollero, entre otras prácticas sustentables.
Así, a través de la plataforma de investigación de León, ubicada en el rancho Los Ramírez, los productores pueden tener acceso a las diversas evaluaciones —los datos de la evaluación aquí referida serán públicos y estarán disponibles una vez concluido el análisis de todos los datos, los cuales podrán ser recabados en su totalidad hasta la cosecha— para elegir aquellas variedades adecuadas que, al final, se traducirán en un aumento en carne de su ganado o el aumento de producción de litros de leche.