El proyecto Buena Milpa, en conjunto con el Programa Colaborativo de Fitomejoramiento Participativo (PCFM), trabaja en las comunidades rurales de Huehuetenango, Quiche, Totonicapán y San Marcos, en Guatemala, para mejorar la calidad de los maíces nativos, como una alternativa local y apropiada para mejorar la productividad del maíz, la conservación de las semillas nativas y mejorar la seguridad alimentaria de la región.
Camilo Tol Can es un productor y técnico agrícola de 42 años de edad, vecino de la comunidad de Caliaj Microcuenca, Panimache, Chichicastenango. Camilo se ha caracterizado por promover tecnologías innovadoras en el campo y actualmente se enfoca en el fitomejoramiento de semillas nativas con un enfoque comunitario y participativo.
Con el apoyo del Proyecto Buena Milpa y a través de múltiples metodologías participativas, este productor cuenta con parcelas demostrativas del cultivo de maíz para la obtención de la semilla y su almacenamiento a través de silos metálicos para evitar pérdidas poscosecha. En cada ciclo de cultivo guarda una reserva de semilla con el fin de compartirla con otros agricultores en caso de alguna emergencia que pudiera afectar sus cultivos. Con la metodología de la selección masal estratificada (SME), este productor ha logrado seleccionar y mantener las características fenotípicas del cultivo más apropiadas para su familia y su comunidad.
Otro importante aporte que ha realizado es promover a nivel comunitario la implementación de la selección masal estratificada. Cuando realiza las actividades de la SME invita a los agricultores de su comunidad a que participen en el proceso con el fin de promover esta práctica y que puedan replicarla en sus parcelas.
Para este técnico es importante producir más y mejor maíz para la seguridad alimentaria de su familia y su comunidad. Al realizar la práctica en la parcela se mejoran características fisiológicas de la planta contrarrestando al acame (caída de la milpa), y al evitar el acame (provocado por el viento y la altura de la planta) se mejora la producción debido a que el porcentaje de pérdidas se reduce.
Camilo comenzó hace años a mejorar su maíz y recuerda que la primera práctica que realizó fue bajar la altura de las plantas de maíz, las cuales medían entre 4 y 5 metros de altura. Actualmente obtiene plantaciones de 1 metro con 60 centímetros y ha disminuido las pérdidas por acame en sus cultivos de maíz. Este fue el primer éxito que lo motivó a continuar con el fitomejoramiento participativo de maíces, el cual practica y multiplica en su comunidad con apoyo del Proyecto Buena Milpa, logrando de esta forma la aceptación de la práctica en su comunidad.
La selección masal estratificada es un método de fitomejoramiento ampliamente utilizado en plantas de polinización abierta para aprovechar los efectos genéticos aditivos de toda la población. Esto se utiliza comúnmente en las variedades de maíz. De una población (la cual puede ser un lote, una finca o un área específica donde se siembra maíz), se definen las características más deseables y se van seleccionando los “padres” que las poseen. Luego las semillas de éstos se plantan y se vuelven a buscar las características deseadas en los “hijos”. Cada fase es un estrato, se realiza una selección masal por estratos.