Guanajuato.- Las tecnologías poscosecha son particularmente útiles para conservar granos en buen estado por amplios periodos de tiempo. El programa MasAgro Guanajuato —de la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAyR) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— promueve el uso de tecnologías herméticas para el almacenamiento seguro de granos y semillas, cuidando así la salud de los productores y contribuyendo a la seguridad alimentaria.
A través del programa, durante 2019 se establecieron seis módulos poscosecha (en los que se validan las tecnologías y se comparan con un testigo —o práctica convencional—) y nueve áreas de extensión poscosecha (donde los productores adoptan las prácticas sustentables que ya han sido validadas) en los municipios de Celaya, Salvatierra, Yuriria, Huanímaro, Jerécuaro, Coroneo y Purísima del Rincón.
En todos los módulos, la práctica convencional, o testigo, fue usando costales de polipropileno. Con la intención de que los productores conocieran la cantidad de grano que se pierde por las plagas (como la palomilla, el gorgojo o el barrenador), al grano almacenado en estos costales no le aplicaron pastillas de fosfuro de aluminio (fumigante que es potencialmente dañino para la salud humana).
Las tecnologías herméticas que se evaluaron fueron el silo metálico hermético y la bolsa plástica hermética de amarre (sin aplicarse ningún plaguicida). En cuanto al grano, en cuatro módulos se almacenó maíz blanco, en uno maíz negro y en uno maíz amarillo junto con maíz blanco.
Los módulos fueron levantados en agosto y septiembre, y tanto los costales de polipropileno como los silos y las bolsas herméticas fueron abiertos después de siete u ocho meses para observar y medir el daño hecho por las plagas. Luego de hacer las mediciones correspondientes con el apoyo de los productores, se comprobó que las tecnologías herméticas poscosecha permitieron reducir a menos de 10% las pérdidas de grano; en México estas pueden ser de hasta 40%.