En la comunidad Rancho de Guadalupe se hizo un ensayo usando mejoradores de suelo debido a que los porcentajes de saturación de sodio rebasan los límites establecidos para la buena asimilación de los nutrientes.
Por: José Francisco Romo López, técnico MasAgro Guanajuato.
Valle de Santiago, Gto.- El sodio, en porcentajes de saturación mayores a 5%, es un elemento nocivo para el suelo, pues afecta sus propiedades físicas al provocar la defloculación de las arcillas y el colapso de los agregados; esto conduce a la compactación y la reducción de infiltración de agua y causa limitaciones en la conducción vertical de gases. Los suelos sódicos también tienden a generar valores de pH altos, los cuales reducen la disponibilidad de algunos nutrientes, como fósforo, y algunos micronutrientes. Antes de resolver otros factores limitantes, es necesario eliminar el exceso de sodio del suelo para que éste pueda ser productivo.
El suelo es uno de los recursos naturales más importantes, de ahí la necesidad de mantener su productividad, para que —a través de las prácticas agrícolas adecuadas— se establezca un equilibrio en la producción de alimentos que permita hacer frente al acelerado incremento del índice demográfico. Entre los factores que afectan el aprovechamiento de los nutrientes del suelo destacan: la salinización, que es el deterioro de los suelos por el incremento en el nivel de sales solubles, lo que reduce su capacidad productiva; la degradación física, que se produce a consecuencia de la reducción de permeabilidad, la compactación, la cementación y la degradación de la estructura, entre otros; la degradación biológica, que consiste en el aumento de la velocidad de mineralización de la materia orgánica; y la degradación química, que es la pérdida de nutrientes por lixiviación.
La estrategia más utilizada es agregar calcio (enmienda agrícola) para que éste reemplace al sodio en los sitos de intercambio catiónico; comúnmente, la fuente más barata de calcio es el yeso agrícola. Este trabajo tiene como objetivo evaluar la aplicación de yeso agrícola como mejorador de suelos sódicos para que contribuya a su restauración fisca y química. Los mejoradores de suelo son recursos naturales de extraordinaria importancia que se utilizan para corregir limitantes en las propiedades físicas, químicas y biológicas de los suelos. Es preciso aclarar que las enmiendas no reemplazan los fertilizantes químicos; su efecto acondicionador se refleja en el mejoramiento del ambiente bioquímico del suelo, lo cual se traduce en un mayor aprovechamiento de los nutrientes aplicados al mismo, incrementado su eficiencia y disminuyendo las perdidas por fijación, lixiviación y volatilización. Así mismo, reduce el efecto de las sustancias toxicas y promueve la actividad biológica del suelo.
En la comunidad Rancho de Guadalupe se hizo un ensayo usando mejoradores de suelo debido a que los porcentajes de saturación de sodio rebasan los límites establecidos para la buena asimilación de los nutrientes. Primero se realizó la toma de muestra de suelo y, con base en los resultados obtenidos, se llegó a la conclusión de hacer una enmienda agrícola porque el porcentaje de saturación de sodio y los carbonatos totales rebasaban los límites establecidos y el pH del suelo tenía un valor de 8.66, lo que muestra alcalinidad; debido a esto, algunos elementos esenciales para la planta —con los cuales contaba el suelo— no estaban disponibles.
La aplicación del yeso agrícola se realizó de manera incorporada mediante el uso de una sembradora de grano fino; debido a la falta de maquinaria en la zona, el resto de los mejoradores de suelo fueron aplicados con el aspersor de tractor. En la siguiente gráfica se muestra una productividad de 30% en el cultivo de cebada con el uso de mejoradores.
Gráfica 1. Comparativa de rendimiento en kg/ha y mejorador de suelo.