Técnicos, estudiantes y autoridades locales recorrieron la plataforma de investigación León, en el municipio del mismo nombre, en Guanajuato. La plataforma inició operaciones en el ciclo primavera-verano 2019 y es resultado de la colaboración entre el Gobierno municipal —a través de la Dirección General de Desarrollo Rural—, la Universidad De La Salle Bajío, la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAyR) —del Gobierno estatal— y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
La plataforma, ubicada en el rancho Los Ramírez, es una de las creadas más recientemente en el marco del programa MasAgro Guanajuato —de la SDAyR y el CIMMYT— y un espacio para realizar y validar prácticas agronómicas sustentables que permitan a los productores desarrollar cultivos rentables sin afectar al medioambiente y garantizar, a su vez, la seguridad alimentaria de la población.
De manera particular, la plataforma de investigación busca soluciones a diversos problemas relacionados con la producción de forraje en condiciones de riego en la zona centro-oeste de Guanajuato. Adicionalmente, a través de ella se difunden innovaciones agronómicas —como el Manejo Agroecológico de Plagas (MAP), que permite reducir la aplicación de plaguicidas potencialmente nocivos para la salud humana— y se establecen y exhiben vitrinas de maíces para silo y cultivos alternativos.
En el recorrido también participaron María del Socorro Durán, vicerrectora de la Universidad De La Salle, y Rodolfo Ponce, director general de Desarrollo Rural de León, quienes resaltaron la importancia de la colaboración y la innovación para responder a los desafíos actuales del campo guanajuatense.
Con Agricultura de Conservación —sistema de producción sustentable basado en la mínima labranza, la cobertura del suelo y la rotación de cultivos— como base de sus investigaciones, la plataforma de León busca generar las estrategias adecuadas para desarrollar en los productores las capacidades que les permitan —desde la práctica de una Agricultura Sustentable— incrementar sus rendimientos; disminuir sus costos de producción; y, sobre todo, cuidar la principal infraestructura de su actividad productiva: los suelos y el agua.