José Luis Gervacio Paz y sus hermanos cultivan maíz, alfalfa, avena y cebada en San Isidro, localidad del municipio de San Juan del Río, Querétaro. Trabajan entre 30 y 40 hectáreas cada ciclo productivo. Se trata de tierras que ellos rentan y, por lo mismo, siempre están buscando áreas de mejora que les permita ser más rentables.
No siempre se dedicaron a la agricultura. Sus primeras siembras las realizaron hace apenas 12 años, por lo que son productores relativamente nuevos en el ámbito agrícola. A pesar de eso, han ido avanzando poco a poco con paso firme, siempre buscando mejorar y acudiendo a eventos donde haya información útil para optimizar las parcelas que trabajan.
Al igual que muchos productores de la región donde ellos están, comenzaron a trabajar de manera convencional, es decir, realizando barbecho o subsuelo, dos pasos de rastra, surcado, riego, siembra y las demás actividades preestablecidas que se señalan en los “paquetes tecnológicos”.
En su constante búsqueda por aprender y hacer más rentable su actividad, en el año 2015 conocieron el trabajo para impulsar la Agricultura Sustentable —orientada a la generación de sistemas agroalimentarios que, de forma sostenible en el tiempo y en concordancia con el contexto sociocultural, sean capaces de preservar los recursos naturales— que realizan de forma conjunta el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
Con la implementación de prácticas sustentables adecuadas y, por decirlo de algún modo, “a la medida”, comenzaron a bajar sus costos de producción y a ser más eficientes en la aplicación de los insumos. Hoy, se sienten orgullosos y motivados porque otros productores se comienzan a acercar a ellos para preguntarles qué están haciendo en sus parcelas para obtener buenos resultados.
Así, practicando una Agricultura Sustentable fue como llegaron al proyecto Cultivando un México Mejor —impulsado por HEINEKEN México y el CIMMYT—. A través de él, lograron tener asistencia técnica continua, lo que ha contribuido a que sigan optimizando su sistema de producción, particularmente el de la cebada —en los ciclos otoño-invierno 2018-2019 y otoño-invierno 2019-2020 han participado en el proyecto con un área de extensión donde han implementado Agricultura de Conservación—.
Con Agricultura de Conservación —sistema en el que la mínima labranza y la cobertura del suelo son componentes básicos— han logrado ahorros de hasta $3,500 por hectárea y han establecido “un programa de diagnóstico para determinar qué trabajos de acondicionamiento tenemos que realizar en cada uno de los predios. A pesar de que en los últimos dos ciclos el calor, las enfermedades y después el granizo nos afectaron, gracias a las prácticas implementadas, hemos logrado recuperarnos y obtener un pequeño margen de ganancia, a pesar de que son tierras rentadas”, comenta José Luis.
“Recientemente aplicamos tratamiento a la semilla para disminuir el ataque de enfermedades por hongos, fertilidad integral, disminución de densidad de siembra y monitoreo de insectos para evitar el uso de insecticidas. También hemos participado en eventos de capacitación con maquinaria especializada que hemos comprado y que prestamos para esa capacitación”, señalan los hermanos.
José Luis y sus hermanos, consideran que el acompañamiento técnico que les ha proporcionado el proyecto ha sido fundamental: “siempre es importante tener a alguien que pueda orientarnos en la aplicación de estas técnicas que —en ocasiones— por no implementarlas bien, lejos de beneficiarnos, terminan por complicarnos. Nosotros tenemos ganas de seguir aprendiendo y estamos dispuestos a colaborar ya que, con esto, tendremos mejores resultados en nuestros predios”, comentan.
Finalmente, los hermanos Gervacio Paz aconsejan a otros productores: “nosotros, que rentamos, tenemos que buscar el ahorro y la buena producción para mantenernos y que nos vaya bien, por lo que invitamos a más productores a sumarse a la adopción de prácticas sustentables, porque en verdad les ayudarán a ser mejores agricultores”.