¿Puede la mecanización favorecer la intensificación agrícola de una forma sostenible y facilitar además su adaptación a las nuevas condiciones impuestas por el cambio climático? Dentro de los enfoques existentes, la mecanización climáticamente inteligente destaca por ser una herramienta para lograr una agricultura adaptada al clima.
La mecanización climáticamente inteligente se puede definir como el despliegue de tecnologías de mecanización que permite mitigar el cambio climático, adaptarse a él y contribuir a la seguridad alimentaria.
Con respecto a la mitigación, esta se refiere a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y a la mejora de la eficiencia en el uso de los recursos. La adaptación, por su parte, se centra en las tecnologías que permiten a los agricultores responder adecuadamente a los eventos climáticos cada vez más impredecibles y, en lo que respecta a la seguridad alimentaria, se trata de enfocarse en promover tecnologías que conduzcan a una mayor productividad y a la reducción de las pérdidas de alimentos.
A partir de este enfoque sobre el potencial de una mecanización agrícola pertinente, un equipo de investigadores del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) desarrolló recientemente un taller sobre mecanización a escala adecuada dirigido a personal de diversos centros de investigación del CGIAR en Madagascar, Etiopía, Zimbabue y Kenia.
En el marco del proyecto global Excelencia en Agronomía —una nueva iniciativa del CGIAR—, los investigadores del CIMMYT condujeron a los participantes hacia una reflexión sobre las implicaciones y alcances de una mecanización climáticamente inteligente, sus componentes y cómo estos se vinculan con otras prácticas y tecnologías de agricultura sustentable orientada al clima, así como los contextos en que se usa o debería ser usada la maquinaria.
Identificar y seleccionar la maquinaria apropiada para condiciones de cultivo específicas con el fin de ayudar a mitigar y adaptarse al cambio climático —y su impacto en los calendarios de cultivo y uso en sistemas de producción adaptables— implica considerar que mecanizar el campo va más allá de usar una máquina específica en una parcela a fin de secuestrar carbono o seleccionar tractores de bajo consumo de combustible.
“Durante todo el ciclo de producción existen oportunidades para mecanizar el trabajo que permite mayor precisión, mayor eficiencia y facilita la implementación de prácticas mejoradas y operaciones oportunas. La maquinaria climáticamente inteligente puede ir más allá de la aplicabilidad de la operación de campo directa y, al contemplar la posibilidad de incorporar equipo más allá de la maquinaria agrícola —como estaciones meteorológicas, microdosificadores y equipos poscosecha—, sugiere la noción de inteligencia en la generación y el uso de datos para una mejor toma de decisiones”, señalan los especialistas.
Entre los resultados del taller, que está sentando las bases para futuras acciones del CGIAR y sus centros de investigación en el continente africano, destaca la identificación de problemas de mecanización que pueden ser abordados a través de una amplia gama de enfoques y actividades: desde la creación de prototipos, la investigación adaptativa en campo, la puesta a prueba de modelos comerciales y la creación de comunidades de práctica.
A partir de este ejercicio se pudo identificar además la necesidad de desarrollar una serie de productos o herramientas de conocimiento esenciales que permitirían revisar el potencial de soluciones mecanizables para casos específicos y sustentar la creación de prototipos, así como la validación y escalamiento de dichas soluciones de forma conjunta con los productores, los proveedores de servicios y otros actores involucrados con los que se podría innovar, organizar y transformar la mecanización agrícola en África. #ExcellenceInAgronomy #ExcelenciaEnAgronomía