Representantes de alto nivel de la Fundación Carlos Slim (FCS) y del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) visitaron la sede del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) para conocer la investigación de campo y laboratorio que se realiza en este organismo internacional de investigación sin fines de lucro para el desarrollo sostenible de los sistemas de producción en México y el mundo.
El recorrido incluyó visitas al banco de germoplasma del CIMMYT, donde se conservan las colecciones de biodiversidad del maíz y del trigo más grandes del mundo, así como a los laboratorios, invernaderos y campos experimentales donde se aplica ciencia de vanguardia para mejorar el potencial de rendimiento, la capacidad de adaptación al cambio climática, la resistencia a plagas y enfermedades y la calidad nutricional y de procesamiento del maíz y del trigo.
“El CIMMYT desarrolla Maíz para México, proyecto de investigación y desarrollo de capacidades donde pequeños agricultores incrementan su productividad para ampliar sus oportunidades de mercado y entrar, por ejemplo, en la cadena de suministro de grandes empresas que tienen una proveeduría y contribuyen, a su vez, al desarrollo social del campo mexicano”, señaló Juan Cortina Gallardo, presidente del CNA.
Maíz para México, uno de los más de 150 proyectos de desarrollo integrado de sistemas de maíz y trigo que desarrolla CIMMYT en 50 países, se sostienen sobre la infraestructura de investigación de clase mundial que financió la fundación Carlos Slim.
“Nuestro objetivo es poner los laboratorios, invernaderos y campos experimentales del CIMMYT al servicio de los sectores público y privado para acelerar el desarrollo de prácticas agrícolas sostenibles y de variedades más nutritivas y resilientes que contribuyan a transformar los sistemas agropecuarios de todo el mundo, a fortalecer la seguridad alimentaria global y a reducir el impacto de la agricultura al cambio climático”, señaló Bram Govaerts, director general de CIMMYT.
Los representantes de la FCS y del CNA coincidieron en que los sectores público y privado, la sociedad civil y los organismos internacionales como el CIMMYT deben colaborar más para enfrentar con éxito los retos del cambio climático, la migración forzada y la inseguridad en el medio rural.
“Es necesario dar más visibilidad y aprovechar los laboratorios y campos de investigación de clase mundial del CIMMYT para potenciar su impacto en esas áreas del desarrollo sostenible y de la agenda 2030”, agregó Cortina Gallardo.