“Mi hija me convenció de poner una parcela demostrativa con tecnologías que está promoviendo el CIMMYT y Walmart Foundation. Ahí hemos tenido buenos resultados, tenemos buenos rendimientos y hay incluso plantas de maíz con dos mazorcas”, comenta el señor Andrés Porras, agricultor de Oaxaca, México.
Andrés es uno de los agricultores que participan en el proyecto ´Fortalecimiento del Acceso a Mercado para Pequeños Productores de Maíz y Leguminosas en Oaxaca, Chiapas y Campeche —de Walmart Foundation y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)—. A través de esta iniciativa recibe asesoría para la implementación de prácticas de agricultura sustentable.
Concepción, la hija de Andrés, es ingeniera agrónoma y actualmente la organización para la que trabaja está colaborando con el proyecto que impulsan el CIMMYT y Walmart Foundation. “Estamos trabajando sobre parcelas demostrativas con la intención del que el productor adquiera nuevos conocimientos, y así mismo comparta sus conocimientos con los demás productores, para su seguridad alimentaria y para tener un mejor rendimiento en sus cultivos”, menciona Concepción.
“Normalmente en mi comunidad siembran la mayor parte de maíz en temporal, y muchos siembran el maíz criollo, pero lo siembran a la suerte, a ver si llueve o a ver si no. Yo le decía a mi papá que está bien siempre mantener nuestras semillas criollas, pero también pensar que en el futuro que va a llover menos. Ahorita que no quiere llover, por ejemplo, hay que buscar maíces mas resistentes, más tolerantes ala sequía”, comenta Concepción.
Así, sin abandonar el cultivo de maíces criollos, “Le dije a mi papá que hay otras variedades de maíz que han tenido buenos rendimientos. Le dije «anímese a sembrar un poco», pero mi papá siempre ponía un poquito de resistencia, hasta que lo convencí. Después, con base en los resultados, es que los productores van compadres con los vecinos, con los tíos, con otras personas a compartir la experiencia y los resultados que han en sus parcelas demostrativas”, señala Concepción.
Para que haya buenos resultados el acompañamiento técnico constante que ofrece el proyecto ha sido fundamental. “Es una responsabilidad muy grande ir con el productor, convencerlo de que hay formas diferentes y buenas de que tenga una mejor cosecha, y siempre tratando de cuidar la salud de los productores y de su familia. Es una responsabilidad muy grande, pero también es una actividad muy bonita porque realmente nunca terminamos de aprender, vamos aprendiendo con el productor y el productor va aprendiendo con nosotros”, menciona Concepción.
Así, mediante el acompañamiento técnico la identificación de variedades de maíz más resistentes a las nuevas condiciones climáticas ha ido acompañada también de mejores prácticas de fertilización y manejo adecuado de plagas y enfermedades, prácticas particularmente importantes para evitar pérdidas que pongan en riesgo la seguridad alimentaria de los agricultores porque, como señala el señor Andrés, “lo utilizamos para autoconsumo, aquí en la zona es realmente difícil encontrar productores que tengan superficies grande, entonces la mayoría siembra para su consumo y muy pocas son las personas que venden el producto”.
El proyecto de Walmart Foundation y el CIMMYT también contempla el impulso a la asociatividad y a los líderes comunitarios, siendo la agricultura sustentable la base para lograrlo. Como menciona Concepción, “Este proyecto nos ayuda a que nuestras comunidades sean resilientes ante todos los problemas que estamos enfrentando ahorita, como el cambio climático y las guerras”.