Existe un 22 por ciento de utilidad final en el sistema de AC con respecto al sistema convencional, con una diferencia de 500 kg por hectárea.
26 de mayo de 2015.
El predio El Zapote o Casas Viejas, ubicado en el municipio de Indaparapeo, Michoacán, es un módulo que pertenece al señor Ricardo Vega, agricultor con siete años de experiencia en el manejo del sistema de Agricultura de Conservación. Poco a poco ha integrado todas sus parcelas a este sistema y mas aún, ha integrado ensayos con nuevas tecnologías que mejoran la calidad y la productividad de su campo. Presentamos a continuación los aprendizajes de su plan de siembra, del reciente ciclo otoño-invierno.
Diagnóstico
Una vez terminado el ciclo, se procedió a realizar el diagnóstico de la parcela; se evaluó la compactación del suelo y la estructura de las camas de siembra y se observó la distribución del rastrojo y la profundidad de raya entre cama y cama, para lo que se encontró que solo se requería reformar las camas.
Para dar seguimiento al diagnóstico de parcela, se reformaron las camas y unos días antes de la siembra se desmenuzaron los residuos. Un aspecto que se resaltó durante el análisis de la estructura del suelo fue que, a pesar de que en el área se cuenta con altos contenidos de arcilla, gracias al manejo que se ha hecho con Agricultura de Conservación se ha podido observar que ya no se cuartea. Esta tendencia se atribuye a la descomposición de las raíces y la buena conservación e infiltración de la humedad.
Siembra
El módulo se iba a establecer con el 100 por ciento del cultivo de maíz, pero gracias al interés del productor cooperante, se acordó implementar un área de ocho hectáreas con el cultivo de sorgo, con la finalidad de presentar en eventos demostrativos o recorridos de campo el manejo que se ha hecho para los diferentes cultivos.
Nutrición
Con los resultados presentados en años anteriores, en este ciclo se realizó la nutrición con base en el análisis de suelo y con la meta de obtener 14 toneladas por hectárea. Hay que resaltar que la fertilización nitrogenada se dividió en tres eventos y se completó con fertilización foliar en etapas críticas.
Se hizo una primera fertilización durante la siembra y posteriormente en la etapa V5 y V12, hay que mencionar que las dos primeras fueron aprovechadas en su totalidad por la planta, lo cual se pudo observar durante su desarrollo; sin embargo, con la tercera aplicación no se tuvo tanto éxito, ya que debido al periodo de sequía intraestival, mejor conocido como “canícula”, no se pudo disolver el fertilizante por la falta de humedad, lo cual limitó alcanzar la meta de rendimiento.
Control de malezas postemergencia
- Sorgo
Para el manejo de la parcela y con base en el monitoreo de malezas, se utilizó una mezcla de atrazina a dosis de 1.5 kg de producto comercial/ha (Agrox 90®), complementándolo con 0.8 litro de la mezcla comercial de terbutrina + atrazina (Gesaprim Combi®), aplicándolo en una etapa de postemergencia temprana, ya que de acuerdo con la experiencia de años anteriores, este aspecto es fundamental para garantizar un control eficiente de malezas.
Posteriormente, se realizó la aplicación de un herbicida quemante paracuat + diuron (Gramocil®), en dosis de 2 litros por hectárea; sin embargo, hubo un tercer crecimiento de malezas por la inestabilidad del temporal, por lo que se tuvo que realizar un corte manual.
- Maíz
Con base en las experiencias en el control de malezas se realizó la aplicación 15 días después del riego de siembra, para garantizar un excelente control sin dañar el cultivo. Con base en el monitoreo, se encontró la presencia de pastos, por lo que se aplicó un herbicida selectivo, Elumis reforzado con Calibre 90. Durante la etapa R1 se aplicó un herbicida quemante al igual que en el cultivo de sorgo. Cabe resaltar que, a pesar del exceso de humedad, la cobertura y el tiempo bajo el sistema de AC, ya no se tuvo una tercera generación de malezas.
Control de plagas y enfermedades
Para el manejo en el módulo se utilizó el trampeo con feromonas, estableciendo ocho trampas en la parcela, lo que permitió disminuir la incidencia del gusano cogollero, principal plaga del cultivo en la región.
Cosecha
Los resultados en el tiempo de cosecha fueron de 10.25 t/ha de sorgo, cultivo para el cual se tenía un estimado más alto; sin embargo, el exceso de lluvia en la etapa inicial afectó el desarrollo de la planta.
Para el cultivo de maíz se obtuvo un rendimiento de 12.2 t/ha, bajo el sistema convencional y en la parcela de innovación se obtuvieron 12.7 t/ha. Al igual que con el sorgo, la estimación era para 14 t/ha. Debido a que no se pudo aprovechar la tercera fertilización, la mazorca no llenó al 100 por ciento.
En la tabla que presentamos podemos observar que, al comparar entre los diferentes sistemas en el cultivo de maíz, existe un 22 por ciento de utilidad final en el sistema de AC con respecto al sistema convencional, con una diferencia de 500 kg por hectárea y con una disminución de 1,320 pesos en los costos de producción.