Se reduce la incidencia de plagas, ahorro en tiempo y dinero, y hay muchos más beneficios que no se logran observar en el primer año
26 de mayo de 2015.
Ante la temporada de siembra que se avecina en el estado de Chiapas, la Agricultura de Conservación es una de las prácticas que debe ser implementada por los productores, porque es una alternativa rentable y ecológica que minimiza la contaminación del medio ambiente, así lo expresó Venancio Jiménez, ingeniero agrónomo y técnico del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT).
Explicó que esta práctica se basa en un sistema de producción sustentable, rentable y que se adapta a diferentes condiciones. Argumentó sobre los beneficios de la aplicación de este sistema, entre ellos, el ahorro del recurso económico tan solo en la preparación del terreno. Agregó que también se reduce la incidencia de plagas, ahorro en tiempo y dinero, y hay muchos mas beneficios que no se logran observar en el primer año.
Sostuvo que esta práctica incrementa la producción de los cultivos y, al mismo tiempo, reduce la erosión, aumenta la eficiencia del uso del agua, mejora el nivel de vida de la población rural y restaura el medio ambiente en los países en desarrollo.
Destacó que varios agricultores del estado de Chiapas han adoptado e implementado la Agricultura de Conservación, debido a la alta rentabilidad y los beneficios que aporta al suelo, al evitar la erosión eólica e hídrica, en especial en zona de laderas.
“Trabajamos en varios municipios, en Villa Flores, Villa Corzo, Ocozocoautla, Chiapa de Corzo, Rayón, Copainalá, Ocosingo, Frontera Comalapa, Las Margaritas y ahora estamos entrando en la zona de Palenque”, explicó.
Venancio Jiménez invitó a los productores de granos de la región Mezcalapa, Chiapas, a que se sumen a esta práctica de la Agricultura de Conservación porque trae grandes beneficios a corto, mediano y largo plazo.