La actividad agrícola, ganadera y la gestión del sistema alimenticio actual generan cerca del 23% de los gases de efecto invernadero que propician el calentamiento global y contribuyen al cambio climático, por lo que la transformación de este sector hacia sistemas más sostenibles debe ser una prioridad.
Además del impacto ambiental, la relación entre agricultura y ganadería en términos de productividad y rentabilidad no siempre es la más adecuada: el sobrepastoreo propicia la compactación del suelo, la alimentación del ganado no permite conservar el rastrojo como cobertura del suelo —dificultando la implementación de prácticas sustentables para incrementar la cantidad de materia orgánica y mejorar las propiedades del suelo—, etcétera.
Aunque da la impresión de que combinar agricultura y ganadería no es lo más conveniente, esto no es necesariamente así. De hecho, es posible crear sinergias muy positivas entre ganadería y agricultura, específicamente si se toma como base la agricultura de conservación, tal y como lo hace el proyecto CLCA —impulsado por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) e implementado por el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) y diversos colaboradores—.
CLCA es un proyecto que promueve el uso de la agricultura de conservación en sistemas agropecuarios en zonas áridas para mejorar la eficiencia en el uso de agua, la fertilidad del suelo y la productividad.
En Oaxaca (México), uno de los lugares donde se desarrolla el proyecto, recientemente el Hub Pacífico Sur del CIMMYT ha realizado diversos ensayos, por ejemplo, combinando la siembra de diferentes cultivos para fijar nitrógeno atmosférico en el suelo y proporcionar al ganado un mejor forraje, es decir, una alimentación más balanceada y completa comparada con los sistemas convencionales en donde el ganado pastorea lo que encuentra.
Resultado de este proceso de identificar cuáles son los forrajes que nutren de mejor manera a los animales se han elaborado distintos materiales, entre ellos un Manual de bloques multinutricionales —un bloque multinutricional es un compuestos alimenticio sólido y balanceado que fue diseñado para que el ganado lo consuma de forma gradual en el corral— que los promotores del proyecto CLCA comparten en espera de que sea de utilidad para técnicos y productores agropecuarios en condiciones similares a las existentes en la Mixteca de Oaxaca.