H.S. Jat, P.C. Sharma, Kumar Singh
Del 27 de septiembre al 4 de octubre, científicos de los sistemas nacionales de investigación agrícola de la India participaron en el programa de capacitación “Agricultura de Conservación: Creación de sistemas de producción robustos y estables” que se realizó en las instalaciones del Instituto Central de Investigación sobre Salinidad del Suelo (CSSRI), en Karnal, India. Se instruyó a los investigadores en el uso de las técnicas agronómicas de la agricultura de conservación (AC) y en la planeación estratégica de ensayos de AC.
El programa fue coordinado por la Iniciativa para la Producción de Cereales en el Sur de Asia (CSISA) del CIMMYT en colaboración con el Consejo Indio de Investigación Agrícola (ICAR) y CSSRI. Asistieron al curso 18 investigadores de la División de Manejo de Recursos Naturales, del Instituto de Investigación sobre Arroz y del CIMMYT.
Al inaugurar el programa, el Dr. J.S. Chauhan, director general adjunto (Semilla) del ICAR, hizo énfasis en la importancia de la capacitación sobre AC para mejorar la productividad del campo y los sistemas de producción en las diferentes regiones agroecológicas de la India. La AC es una tecnología que contribuye al sustento de los pequeños agricultores y, al mismo tiempo, protege los recursos naturales y mejora su calidad. El Dr. D.K. Sharma, director de CSSRI, explicó que la AC ayuda a frenar el agotamiento de los mantos freáticos, la pérdida de fertilidad del suelo, que se asocia con diversas déficits de nutrientes, brotes de plagas y elevada concentración de gases de invernadero en la atmósfera. Habló también de cómo diseñar sistemas de producción diversificados, robustos y estables que aprovechen mejor los recursos, como una opción a los sistemas intensivos de arroz-trigo.
A nivel mundial, el impacto positivo que las técnicas de la AC han tenido en los recursos naturales, la adaptación al cambio climático y la mitigación de sus efectos, tiene amplio reconocimiento. En India, ya empezó a hacerse investigación estratégica de esta tecnología, que incluye aplicación precisa de nutrientes, agua, variedades y manejo de malezas. Sin embargo, la AC sigue siendo relativamente un concepto nuevo en el país. En su intervención, Andrew McDonald, líder de CSISA, habló de cómo la siembra continua en los sistemas de producción arroz-trigo por cerca de cinco décadas en las Llanuras Indogangéticas ha causado el deterioro de recursos naturales como el agua y el suelo, lo cual, en consecuencia, ha repercutido en el clima y la diversidad. “Este programa de capacitación ofrece una oportunidad única a los miembros de la comunidad científica del país que trabajan en el área de gestión de recursos naturales de ayudar a buscar soluciones a los problemas del agua, la mano de obra y la energía, haciendo uso de tecnologías modernas de producción agrícola”, recalcó McDonald.
El temario incluyó los principios de la AC, con ejercicios en el campo y técnicas modernas para mitigar de manera eficaz los efectos del cambio climático y estrategias de adaptación, evaluación de impactos de las prácticas de la AC y manejo sustentable de recursos naturales que garanticen la seguridad alimentaria y la rentabilidad y la productividad del campo. Los participantes tuvieron la oportunidad de practicar con diferentes implementos como el nivelador láser, sembradoras turbo, multicultivos y para camas, así como una trasplantadora mecánica; aprendieron también a medir las emisiones de gases de invernadero.
Participaron asimismo en los ensayos estratégicos en los sitios de Kulvehri y Taraori, en Karnal. H.S. Sidhu, ingeniero de desarrollo agrícola del Instituto Borlaug para el Sur de Asia (BISA), y M.L. Jat, agrónomo sénior especialista en sistemas de producción del CIMMYT, hicieron una presentación sobre el ensayo estratégico permanente de AC para sistemas intensivos de producción de cereales, compartieron sus experiencias y hablaron de los resultados de las actividades que se realizan en BISA, así como del proyecto que tiene en Ladhowal, Ludhiana. Jat dio una explicación del uso de la AC y de la agricultura climáticamente inteligente para lograr la suficiencia alimentaria en 2050 mediante sistemas que hagan un uso eficiente de los insumos en los diversos sistemas de producción y condiciones climáticas.