La agricultura de conservación es un sistema de producción sustentable con muchos beneficios: “La agricultura de conservación es un enfoque en la producción agrícola que se centra en la conservación del suelo, el agua y la biodiversidad, así como en la reducción del uso de insumos químicos”, explica el equipo técnico de Agriba Sustentable —una colaboración entre PepsiCo México, Grupo Trimex y CIMMYT—, el cual enfatiza en que este enfoque utiliza técnicas que maximizan el uso eficiente de los recursos naturales y minimizan el impacto ambiental.
En Irapuato, uno de los municipios de Guanajuato donde se desarrolla el proyecto, los productores han adoptado varias prácticas de agricultura de conservación, logrando una significativa reducción en los costos de producción. “Allí, las prácticas adoptadas por los productores han logrado disminuir los costos de producción hasta en 12 % solo en la preparación mecánica del suelo”, puntualizan los técnicos del proyecto, agregando que ese ahorro se debe en gran parte a la reducción de la labranza y al mantenimiento de la cubierta del suelo.
La labranza reducida y el uso de cubiertas vegetales no solo disminuyen los costos de preparación del suelo, sino que también contribuyen a mantener los rendimientos al mismo nivel o incluso superiores al manejo convencional. “Al realizar labranza vertical en el fondo de la cama de siembra y mantener la cubierta vegetal del cultivo anterior se logra que la humedad del suelo se mantenga, previniendo que se presente estrés hídrico en el cultivo”, mencionan.
Además de la reducción de costos, la agricultura de conservación ofrece varios beneficios adicionales:
- Ahorro de tiempo y esfuerzo: Al no tener que preparar el suelo mediante el arado, se requiere menos trabajo y tiempo.
- Ahorro de combustible: La mínima labranza reduce el consumo de combustible y la emisión de gases contaminantes.
- Mayor conservación del suelo: Ayuda a mantener la estructura del suelo y a prevenir la erosión, mejorando también la vida del suelo al promover la actividad de microorganismos beneficiosos y la retención de humedad.
- Mayor rendimiento: Se logran rendimientos más altos que con la siembra tradicional, debido a que el suelo se mantiene más húmedo y se reduce el crecimiento de malezas.
La agricultura de conservación no solo es económicamente ventajosa, sino que también es ambientalmente sostenible. Estas prácticas ayudan a preservar los recursos naturales y a reducir el impacto ambiental de la agricultura. Mantener la estructura del suelo y prevenir la erosión son fundamentales para la sostenibilidad a largo plazo.
A pesar de sus numerosos beneficios, la agricultura de conservación también presenta desafíos, como la necesidad de un mayor conocimiento y habilidades por parte de los agricultores. Por ello, “el equipo técnico de Agriba se enfoca en capacitar y asesorar a los productores de la región Bajío que estén dispuestos a colaborar y contribuir a la adopción de prácticas sostenibles”.
Con el apoyo de PepsiCo México, Grupo Trimex y CIMMYT, los agricultores del Bajío están aprendiendo a implementar prácticas que no solo reducen los costos y mejoran los rendimientos, sino que también protegen el medioambiente. Esta combinación de beneficios económicos y ambientales hace de la agricultura de conservación una opción atractiva y viable para el futuro de la agricultura en México.