El CIMMYT impartió recientemente un curso intensivo de tres semanas para 38 jóvenes mejoradores zambianos, incluidas 12 mujeres, con objeto de proporcionarles los conocimientos que necesitan para aplicar métodos de mejoramiento modernos en sus respectivos programas. Hubo participantes de los programas nacionales y empresas semilleras privadas de 12 países de África y Paquistán.
Moses Mwale del Instituto de Investigación Agrícola de Zambia (ZARI) dio la bienvenida a los participantes y dijo que la capacitación es crítica, ya que la agricultura contribuye con más del 40% del producto interno bruto de Zambia y proporciona más del 70% del total de empleos en África; hasta un 80% de la población africana vive en zonas rurales y depende en gran medida de la agricultura para obtener sustento e ingresos.
En su intervención, Mwale dijo que “Pese a su inmenso potencial, en los últimos años, el maíz no ha tenido mucho impulso en África. Las principales causas son la falta de inversión, la dependencia en la agricultura de temporal, el poco uso de semilla mejorada y la falta de investigación y desarrollo agrícola apropiados, que han ocasionado bajas en la producción y la productividad, y altos costos de operación a las agroempresas”.
Por primera vez, se dedicó una buena parte del curso a los temas de manejo agronómico e integración de género en la investigación y producción de maíz.
El agrónomo Isaiah Nyagumbo impartió una sesión de prácticas agronómicas recomendadas para elevar los rendimientos, la productividad y los ingresos, y preservar los recursos naturales. Hizo énfasis en que la inversión en mejoramiento de maíz genera beneficios si se mejoran las prácticas agrónomicas en las fincas. Nyagumbo también mostró a los investigadores el nuevo equipo recomendado para preparar la tierra bajo el sistema de agricultura de conservación, incluyendo sembradoras manuales, sembradoras Li o azadones y escarificadoras de tracción animal.
Vongai Kandiwa, especialista en género, habló de “Aprovechar el conocimiento de la equidad de género en el mejoramiento de maíz y la distribución de semilla”. Basándose en pruebas existentes de las brechas de género en cuanto a conocimientos y adopción de tecnologías, Kandiwa resaltó la importancia de crear tecnologías de maíz que satisfagan las necesidades tanto de hombres como de mujeres. Kandiwa aportó ideas sobre enfoques con perspectiva de género para realizar ensayos en finca y difundir información, sobre todo de las variedades que se han liberado recientemente.
Durante el curso, la fisióloga Jill Cairns explicó a los participantes cómo preparar y hacer una buena presentación, un reto tanto para científicos distinguidos como para científicos que comienzan su carrera.
Varios científicos hablaron de los avances recientes en el mejoramiento de maíz, como el uso de dobles haploides, las herramientas moleculares, los transgénicos y el fenotipeado de precisión Entre los temas principales estuvieron los progresos en fenotipeado, impartido por el fisiólogo Zaman Mainasarra, quien hizo una demostración del uso de los vehículos aéreos no tripulados para capturar imágenes digitales y recolectar datos de fenotipeado de manera rápida, económica y precisa.
Otros temas fueron la teoría del mejoramiento convencional, mejoramiento para obtener tolerancia a factores abióticos y hacer frente al cambio climático, mejoramiento para obtener resistencia a factores bióticos, con especial énfasis en evitar la propagación de la necrosis letal del maíz (MLN), y mejoramiento para obtener calidad nutricional (maíz con calidad proteínica y provitamina A). Max Mbunji, de HarvestPlus, habló del progreso que han hecho en Zambia en el desarrollo y distribución de maíz con provitamina A en los últimos siete años.
Liberación y registro de variedades, producción de semilla y administración de empresas semilleras en África fueron otros temas del programa. Los mejoradores aprendieron como avanzar semilla original a semilla certificada, mantener la pureza genética y la calidad, dar asistencia a las nuevas compañías semilleras y sobre la normatividad, políticas y procedimientos vigentes en diferentes países.
Los investigadores visitaron una parcela experimental de HarvestPlus, donde aprendieron más sobre los análisis de provitamina A. En la estación experimental del ZARI, en Nanga, observaron las actividades de selección para obtener tolerancia a la sequía y producción de semilla del programa nacional de mejoramiento de maíz de Zambia.
Al concluir el curso, Annah Takombwa, gerente interino de asuntos técnicos de la Oficina Nacional de Biotecnología de Zimbabwe, dijo: “Muchas gracias por darme la oportunidad de participar en el nuevo programa de capacitación para mejoradores del Programa Global de Maíz. Fue un gran honor y un privilegio. Ya estoy aplicando las habilidades y conocimientos que adquirí en mis actividades cotidianas”.
El curso fue organizado y coordinado por Cosmos Magorokosho, Stephen Mugo del CIMMYT y Abebe Menkir del Instituto Internacional de Agricultura Tropical (IITA). La asistencia de los participantes fue patrocinada por varios proyectos del Programa Global de Maíz, incluidos DTMA, DTMASS, Dobles Haploides, Maíz que hace un uso más eficiente del agua para África, Maíz mejorado para los suelos de África, el proyecto para obtener tolerancia al calor de USAID, MLN, HarvestPlus, y las compañías semilleras de ZAMSEED y SEECDCO.